El beso

Anoche salí a batutear. EXCELENTE idea, el partner no arrugó, buen danzarín y chistoso más encima. The only problem es que recién anoche supe que es dos años más chico... grrrrrrr, qué lata, algo me cambió en el switch. O sea, mi nivel de entusiasmo no pasó de la curiosidad inicial, pero claramente ésto en parte también se debe a factores que no tienen nada que ver con él. Hoy fui a misa semi-arrastrada por mi hermano. La disfruté harto, quizá porque me hizo mucho sentido lo de "no nos dejes caer en tentación y líbranos del mal, Amén". Recé ese Padrenuestro de todo corazón. Pedí fuerzas. Me siento débil, y no me gusta en absoluto esta sensación de fragilidad, estas pruebas a la voluntad. Qué hacer, capear el temporal hechando mano a LO QUE SEA. Conocí a mi futura proyecto-de-cuñada. Me pareció bien la chica. Ojalá que resulte, mi chanchis se ve harto embalado, pero espero que por lo mismo no la vaya a asustar...
Finalmente RODIN.
La escultura no es mi manifestación artística favorita, pero debo reconocer que esas esculturas me gustaron más allá de lo normal. Quizá porque recién acabé de releer a Dante y su Divina Comedia; no tenía idea que "El Pensador" era Dante mismo meditando ante las puertas del Infierno, ni que ese "El Beso" era aquel beso adúltero de Francesca y Paolo condenados a arder en el segundo círculo del Infierno forever.
No quiero ser aguafiestas, pero sólo un detalle... "El Beso" en realidad, nunca fue beso... los labios de esos amantes nunca llegan a tocarse, pero la expresión íntegra de esos dos cuerpos entrelazándose es absolutamente conmovedora...
Y qué decir de "La Edad de Bronce". Parada frente a ese hombre de bronce, sentí la tentación de decirle "habla..." tal cual dicen que hizo Miguel Ángel cuando terminó su Moisés (o el David?).
Pero basta. No soy crítica de Arte ni pretendo llegar a serlo alguna vez. Sólo se que me gustó mucho esta visita al Bellas Artes. En realidad me encantan los museos, de casi todo tipo, desde siempre. Aunque descubrir el arte para mí es un acto solitario, me estorba en verdad alguien más al lado a quien deba esperar o que me espere y/u observe en ese proceso tan íntimo mío de buscar que la obra me hable. Cosas de mí.